viernes, 14 de noviembre de 2008

El amor de Dios,para tí y para mí.


Esta semana,me tocó ir a un curso del programa Puente,para ser sincera no tenía muchas ganas de participar,por los momentos que estoy viviendo,pero la verdad me arrepiento el pensar así.
Conocí un grupo de personas muy especial y con distintas realidades emocionales,la verdad me sirvió para reconocer,cuanto me ama Dios y lo afortunada de tener lo que poseo.
Cuando medito así, me dan ganas de no quedarme sentada y ver como otros sufren, teniendo en mis manos la manera de ayudarles,no por hacerme ver,no por creerme mas que Dios,no para ser reconocida humanamente;si no porque,es mi dever como hija del altisimo,dar, lo que él en su infinita misericordia me da.
Son realidades tan distintas como las siguientes:
- Abuelas que crian a sus nietos,sin ayuda de nadie y no tienen ni zapatos que ponerles.
- Madres que trabajan en la feria y no tienen que darles de comer (porqué,no tienen gas)
- Mujeres que nesecitan,solo,conversar porque no tienen con quién.
- Mujeres con su autoestima tan por el suelo,que porque sus parejas la dejarón y sus amantes se burlan de ellas,no salen ni a comprar.
Creo fervientemente que si Dios las colocó en mi camino es por algo.
Y tú quisieras unirte a mi grupo terapeutico espiritual,piensaló,meditaló y hablamé.
Nadie hace nada por nadie, pero yo, desde hoy sí,ya les contaré mis avances
y tú que harás por ellos,lo importante es que ores y verás que Dios responderá.
Las aguas no se agitan por si solas,siempre hay alguién que las mueve....piensalo.
Mi titulo aunque no signifique mucho gramaticalmente,moralmente sí.
Dama blanca.